Ya se han vulnerado desde hace décadas demasiadas leyes en los Pinares del Espíritu Santo. En la foto, un eslizón ibérico, típico de esta zona e incluído en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas entre otras muchas junto al camaleón.
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Los más de 98.000 euros recibidos como subvención por el Ayuntamiento se ha efectuado sin aún publicarse la convocatoria para acceder a estas ayudas en el BOJA
En el Puntal del Espíritu Santo siempre se ha hecho lo que ha dado la real gana, sin atender casi nunca a legislaciones estatales o regionales. No es cuestión de romanticismo, ni sentimentalismo, pero el acantilado ha dejado fortunas a unos pocos que hicieron del paisaje mediterráneo, por su vegetación, un terreno después de una batalla. Evidentemente esta situación no es de ahora, sino de muchísimos años atrás, pero los que han venido gobernando, unos tras otros tampoco han hecho mucho por poner un poco de orden.
Los camaleones y eslizones puede que no sean especies que interese a la ciudadanía, y tampoco es cuestión de que seamos ahora naturalistas de campo para estudiarlos. Pero la realidad es que son especies que cumplen con una función compleja dentro de los ecosistemas donde han conseguido sobrevivir. Por mi profesión sí me he ocupado de estas especies y de estudiar minuciosamente su biología. “Lo bello es útil y lo feo es inservible” decía más o menos un viejo pensamiento del siglo XIX. Y algo de eso existe todavía en nuestras consciencias. Si un paisaje lo vemos que son sólo matojos- especies interesantes para la ciencia-, dos reptiles como el camaleón y el eslizón ibérico, pequeños en comparación con linces y águilas imperiales, pues no les damos mayor importancia. Pero, queramos o no, tienen una importancia dentro de los ecosistemas y los ambientes a los que han quedado relegados.
Ahora viene la Agendas Locales 21, que emanan de la Cumbre de la Tierra celebrada en Río de Janeiro en 1.992. Digamos que fue una de las tantas propuestas que se aprobaron en tan interesante cumbre por multitud de países. La aplicación en España no ha tenido aún muy buenos resultados. Las Agendas Locales 21 son planes para desarrollar las localidades atendiendo a criterios de sostenibilidad, es decir, de tener en cuenta el medio ambiente, sin frenar el desarrollo. Sanlúcar de Barrameda tuvo en el año 2.000 aproximadamente una avalancha de instituciones para realizar la Agenda Local 21: Fundación Doñana, Fundación Doñana 21, Diputación de Cádiz, Mancomunidad del Bajo Guadalquivir, Costa Noroeste, hasta que todas se ponen manos a la obra. Pero como si de una competición se tratara es la empresa IBERMAD la que termina realizándola para el Ayuntamiento, tomando la delantera, con reuniones pésimas y escasa participación. Eso le valió al Ayuntamiento entrar en el año 2.002 en el Programa Ciudad 21 promovido por la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, donde se tiene opción a ayudas y subvenciones. Ya ha conseguido alguna que otra y a la que queremos llegar es a los 98.000 euros para adecentar el Pinar del “Parque” del Espíritu Santo, que ya hemos comentado en un anterior artículo. Curiosamente esta subvención se ha recibido sin que se haya publicado en el BOJA la convocatoria anual para este tipo de ayudas.
Los camaleones y eslizones puede que no sean especies que interese a la ciudadanía, y tampoco es cuestión de que seamos ahora naturalistas de campo para estudiarlos. Pero la realidad es que son especies que cumplen con una función compleja dentro de los ecosistemas donde han conseguido sobrevivir. Por mi profesión sí me he ocupado de estas especies y de estudiar minuciosamente su biología. “Lo bello es útil y lo feo es inservible” decía más o menos un viejo pensamiento del siglo XIX. Y algo de eso existe todavía en nuestras consciencias. Si un paisaje lo vemos que son sólo matojos- especies interesantes para la ciencia-, dos reptiles como el camaleón y el eslizón ibérico, pequeños en comparación con linces y águilas imperiales, pues no les damos mayor importancia. Pero, queramos o no, tienen una importancia dentro de los ecosistemas y los ambientes a los que han quedado relegados.
Ahora viene la Agendas Locales 21, que emanan de la Cumbre de la Tierra celebrada en Río de Janeiro en 1.992. Digamos que fue una de las tantas propuestas que se aprobaron en tan interesante cumbre por multitud de países. La aplicación en España no ha tenido aún muy buenos resultados. Las Agendas Locales 21 son planes para desarrollar las localidades atendiendo a criterios de sostenibilidad, es decir, de tener en cuenta el medio ambiente, sin frenar el desarrollo. Sanlúcar de Barrameda tuvo en el año 2.000 aproximadamente una avalancha de instituciones para realizar la Agenda Local 21: Fundación Doñana, Fundación Doñana 21, Diputación de Cádiz, Mancomunidad del Bajo Guadalquivir, Costa Noroeste, hasta que todas se ponen manos a la obra. Pero como si de una competición se tratara es la empresa IBERMAD la que termina realizándola para el Ayuntamiento, tomando la delantera, con reuniones pésimas y escasa participación. Eso le valió al Ayuntamiento entrar en el año 2.002 en el Programa Ciudad 21 promovido por la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, donde se tiene opción a ayudas y subvenciones. Ya ha conseguido alguna que otra y a la que queremos llegar es a los 98.000 euros para adecentar el Pinar del “Parque” del Espíritu Santo, que ya hemos comentado en un anterior artículo. Curiosamente esta subvención se ha recibido sin que se haya publicado en el BOJA la convocatoria anual para este tipo de ayudas.
Una de las últimas conferencias organizadas por IBERMAD en Sanlúcar para tratar asuntos de la Agenda Local 21, hace ya más de 1 año.
Una de las condiciones que se tienen que dar para recibir estas subvenciones es que en la localidad se esté realizando la Agenda Local 21. Hasta ahora sólo se ha aprobado el Diagnóstico, y hace más de un año que se está esperando aprobar el Plan de Acción. Nos parece muy poco serio que sin estar desarrollándose la Agenda Local 21, que diríamos que está paralizada hace un año, el Ayuntamiento reciba subvenciones. Y me parece muy poco serio y falto de rigor el trabajo de IBERMAD, la empresa que tutela esta cuestionada Agenda Local 21. No es la primera vez que lo denuncio públicamente. El negocio verde, ecológico, vende mucho ahora en tiempos de cambios climáticos y hay muchos oportunistas sueltos.
Las obras emprendidas hace unos días en el Pinar del Espíritu Santo vulnera no sólo el Plan de Protección del Medio Físico que es del año 1.986, sino otras muchas de carácter ambiental y urbanístico. No me cuadra el uso posible, probable y presunto que se está haciendo del agua potable para el llenado de ciertas piscinas, con el trueque incluso de contadores. Tapias de tres metros y urbanizaciones de casas de dudosa legalidad en el Plan Parcial del Espíritu Santo que habría que vigilar exhaustivamente. Lo digo porque ya son décadas robándole terrenos a tanto verde que estaba cuajado de especies autóctonas del matorral mediterráneo en la barranca del Espíritu Santo y en todas las zonas adyacentes. Y especies como los camaleones han vuelto a sufrir una seria regresión, al igual que el eslizón ibérico (es una especie de culebrilla con patitas pequeñas). Es que a lo tonto, como se dice vulgarmente vamos perdiendo especies y espacios que son de todos los ciudadanos.
Las obras emprendidas hace unos días en el Pinar del Espíritu Santo vulnera no sólo el Plan de Protección del Medio Físico que es del año 1.986, sino otras muchas de carácter ambiental y urbanístico. No me cuadra el uso posible, probable y presunto que se está haciendo del agua potable para el llenado de ciertas piscinas, con el trueque incluso de contadores. Tapias de tres metros y urbanizaciones de casas de dudosa legalidad en el Plan Parcial del Espíritu Santo que habría que vigilar exhaustivamente. Lo digo porque ya son décadas robándole terrenos a tanto verde que estaba cuajado de especies autóctonas del matorral mediterráneo en la barranca del Espíritu Santo y en todas las zonas adyacentes. Y especies como los camaleones han vuelto a sufrir una seria regresión, al igual que el eslizón ibérico (es una especie de culebrilla con patitas pequeñas). Es que a lo tonto, como se dice vulgarmente vamos perdiendo especies y espacios que son de todos los ciudadanos.
Manuel J. Márquez Moy
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