Lo de asuntos triviales suele ser en estas cuestiones políticas muy relativo. Puede ser importante asfaltar una calle o adecentarla, o ser simplemente una acción sin mayor importancia.
Por si no hubiera quedado uno cansado de este mandato que se acerca a su fin, en el Ayuntamiento de Sanlúcar de Barrameda, ahora se multiplican las típicas promesas de unos y otros partidos como si hubieran llegado a este pueblo para convencernos que tienen un elixir que nos va a quitar todos los males. Cuando digo cansado de este mandato no me refiero exactamente al Equipo de Gobierno, sino a una oposición raquítica que ha permitido el relajo de los del PSOE-CIS.
Los medios de comunicación, a mi entender, y según he aprendido escuchando y leyendo a los grandes maestros, Manu Leguineche, Paco Umbral, García Tola, Iñaki Gabilondo, Carmen Sarmiento, Maruja Torres, tienen que aportar un mayor compromiso cuando la sociedad se amuerma y los gobiernos se convierten entonces en tiranos. A veces quedas tan harto de las pésimas estratagemas de los partidos que cada día quedas más convencido que esto no puede seguir así.
Sanlúcar de Barrameda, para remontarnos a una época de esplendor, no sabría con cuál quedarme, si la del pelotazo de finales de los 80 y principios de los noventa del siglo XX, o irme hasta la etapa de los Montpensier. Con el paso de los años aquí seguimos dándole vueltas a la rotonda, a las ratas en la maleza del extrarradio, a casas de juventud para jóvenes sin presente ni futuro, a pinares dinamitados por la holgazanería, apoltronamiento y el escarnio de políticos sin escrúpulos, sin formación e iletrados.
Me excedí en llamar iletrada a Irene García, que ha tenido muchos defectos de gestión, pero sigo pensando que gracias a ella, a Inmaculada Muñoz y Mª José Valencia no estamos peor aún, que ya sería tocar fondo y el abismo. No me interpreten mal, pero con los numerosos errores cometidos por este PSOE a los que dicen representar los situados en el Equipo de Gobierno, tengo todavía mis dudas, destaco la voluntad al menos. Se ha malgastado mucho dinero y no se ha cumplido con las tímidas expectativas de inversiones para suelos industriales, por ejemplo, ni tampoco digamos ya para grandes incoherencias como la del patrimonio histórico. No se puede estar tratando de “poner en valor” (expresión de moda) algo que realmente reportaría grandes beneficios para la ciudad y destruir tanto-revisemos cada cuál el sentido del arte, de la historia, de la estética del paisaje urbano y rural- y quizás entenderemos de una vez que no se puede hablar de patrimonio histórico-artístico si no comprendemos qué significa Arizón para esta ciudad, o el Mercado de Abastos, ó el entramado de calles que forman parte del contexto de cada capítulo de la gran Historia de Sanlúcar de Barrameda.
Hoy se han aprobado los presupuestos del Ayuntamiento para 2.011, y el tema estrella para todos es evidentemente el paro, coyuntural o autóctono, generado por la mala gestión de la crisis financiera por Zapatero, o por la incapacidad de planificar y priorizar los fondos económicos por Irene García. Pero todos han visto en el paro y en las ayudas sociales un filón para las elecciones: un Palacio de Congresos, 800 viviendas oficiales y un hotel de cinco estrellas, un café con el Sr. Marmolejo, candidato del PP a la Alcaldía, que si sigue así terminará de los nervios; y de este modo otras promesas quiméricas, rancias y presuntamente sobornables para el electorado.
En definitiva, como decía al principio se han hecho cosas triviales o no durante estos cuatro años. Pero Sanlúcar de Barrameda se merece mucho más, pero no hay verdaderos compromisos, no hay cantera, formación y altura de miras para que el término municipal se desarrolle de manera “sostenible” (otro modismo del que se abusa sin conocer el concepto real). Seamos todos, me incluyo evidentemente, más sensatos y más humanos y quizá Sanlúcar de Barrameda deje de ser un mito o una entelequia porque el gran reto es que debemos ya ser decisivos en la gestión de los recursos en esta tierra donde desemboca-hasta ahora- el Guadalquivir.
Manuel J. Márquez Moy es Director de "La Aventura Humana"
miércoles, febrero 09, 2011
ES MOMENTO DE ACABAR CON ASUNTOS TRIVIALES Y DE EMPEZAR A SER MÁS DECISIVOS CON LA GESTIÓN DE SANLÚCAR DE BARRAMEDA por Manuel J. Márquez Moy
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