EL MEDIO AMBIENTE NO ES MONOPOLIO DE LOS ECOLOGISTAS

Imágenes de la Algaida

Quiero intentar aclarar que el Planeta siempre ha sido una preocupación de sectores de la sociedad en general, organizada en colectivos o personas que individualmente han emprendido estudios sobre el funcionamiento de la Naturaleza.

Aunque hay otras versiones, resumo las más aceptadas por los que se ocupan de estos asuntos desde una perspectiva de Antropología Social. Siempre encontraremos argumentos y citas bibliográficas antiquísimas de personajes o sociedades que se preocuparon y ocuparon del medio donde vivían. Explotando los recursos por pura supervivencia o por razones de rentabilidad económica.

En la Inglaterra burguesa del siglo XVII y XVIII surgen nombres y Sociedades que se dedican al estudio de la geología, de la botánica, de viajes exploratorios a largas distancias. Dentro de esa burguesía surgen nombres como Wallace o el mismo Charles Darwin, o el sueco Carl Von Linneo, o Gregorio Mendel, o el alemán Humboldt, o el español Celestino Mutis. De todos estos personajes y sus escuelas de seguidores nace modernamente el llamado conservacionismo. La influencia llega a España de la mano principalmente de ornitólogos de Centro y Norte de Europa. La conexión entre ese mundo conservacionista europeo de científicos autodidactas y otros formados en grandes universidades con España llega de la mano de José Antonio Valverde y sir Julian Huxley a mediados del siglo XX, y gracias también a los negocios vinateros que los González-Gordon tenían con las Islas Británicas.

Charles Darwin

Por otro lado, hay un movimiento que puede hundir sus raíces en multitud de ejemplos o referencias históricas que surge modernamente en la lucha por el bienestar del individuo, o de colectivos laborales, con una mayor implicación en las políticas de los Estados. Ese movimiento es el que comienza a conocerse como ecologismo. Las primeras luchas reseñables contra la actitud de ciertos gobiernos, podemos buscarla en las pruebas nucleares y el deterioro que un mundo capitalista comienza a realizar sobre ríos, residuos tóxicos en la atmósfera con la industrialización, desaparición de especies.

Dentro del ecologismo se abre un amplísimo abanico de maneras distintas de frenar ese deterioro del Planeta. Hay conservacionistas, científicos que surgen de las Universidades que también se involucran en esa lucha por un mundo mejor y con mayor calidad de vida, que intente frenar el desarrollismo.

Si bien, todos aparentemente buscan una Naturaleza más habitable por el ser humano y especies animales y vegetales, cada uno lo intenta a su modo.

Carl von Linneo

Ni que decir tiene que el ecologismo en España ha sido importantísimo para conseguir la tan manida concienciación de que hay que preocuparse por el medio ambiente. El error, desde mi punto de vista, es cuando los organismos oficiales, gobernantes, utilizan a los ecologistas para justificar que ciertos proyectos son viables o no sin atentar contra “la ecología”. Y recalco “ecología” porque ahí es donde está la confusión. La ecología es una cosa y el ecologismo otra. Una actitud ecologista puede y sería aconsejable que la tuvieran cuantos más ciudadanos mejor. La participación en defender la Naturaleza debería también ser una labor de todo habitante de esta Tierra.

Un antiguo camino en la Algaida

Para conseguir fines de entender el medio ambiente, cómo funcionan los ecosistemas, el daño que se les puede estar haciendo, no es un monopolio del movimiento ecologista, ya que hay muchísimas personas que desde diferentes disciplinas trabajan día a día para entender, comprender y concienciar a la población de la importancia del Planeta para nuestra supervivencia: Climatólogos, Hidrogeólogos, Químicos, Agricultores, Biólogos, Etólogos, Economistas, Genetistas, Sociólogos….Por ello es de vital necesidad contrastar las opiniones de las diferentes disciplinas que intervienen en el medio, sea urbano, rural o natural.

El caso del Carril Bici en la Algaida

Ecologistas en Acción de Sanlúcar denuncia en este caso concreto un carril bici que está destrozando una zona de la Algaida. En la Junta Rectora del entonces Parque Natural de Doñana se dejó a Ecologistas en Acción que valorase el proyecto de Carril Bici en el año 2.006. Han pasado dos años y todo lo que tenga que ver con el medio ambiente se le consulta a Ecologistas en Acción. La legitimidad para su valoración, protesta, denuncia, está fuera de toda duda.

Pero la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, que no es que sobresalga especialmente por sus ideas de proteger el medio como muchos demandamos no es que pueda hacer lo que quiera, por lo que el Ayuntamiento de Sanlúcar tampoco debe dejar carta blanca para que gestionen la Algaida sin velar y fiscalizar lo que se hace en esta zona Sur del Espacio Natural de Doñana. Y ya va siendo hora que para opinar y participar públicamente se le dé cabida a otros colectivos y otros profesionales que conocen el medio ambiente, sin desmerecer los trabajos que ecologistas y ciudadanos independientes vienen haciendo hace muchos años.
El Carril Bici está claro que no recorre el lugar más acertado, y que hay otras muchas alternativas más óptimas para el turismo ecológico, para simples paseantes o deportistas, pero tampoco se daña al ecosistema si se regula el paso y la velocidad. Aunque entiendo que eso en la Algaida es bastante complejo de controlar.

Me preocupa más, por ejemplo, la intrusión marina en el nivel freático, la carencia de un programa de gestión claro y transparente para la Algaida y las Marismas de Bonanza. El descenso alarmante de aves insectívoras-indicador del aumento de pesticidas en el área-.

Manuel J. Márquez Moy