El sanluqueño Luis García Garrido asegura que las salinas artesanales y sus productos derivados son muy demandados y que con esta nueva norma se obtendría una gran rentabilidad económica.
EL SENADO APRUEBA POR UNANIMIDAD UNA PROPUESTA DEL PSOE PARA REDUCIR EL LÍMITE DE CLORURO SÓDICO ESTABLECIDO EN LAS SALES ARTESANALES PARA FORTALECER EL SECTOR Y HACERLO MÁS COMPETITIVO
La Comisión de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca del Senado ha aprobado este mediodía por unanimidad de todos los grupos parlamentarios una propuesta del Grupo Socialista para modificar la normativa en relación con la comercialización de los productos derivados de la obtención no industrial de la sal.
El senador socialista por la Comunidad Autónoma de Andalucía, Luis García Garrido, ha defendido la moción y ha logrado consensuar con el resto de grupos parlamentarios el texto definitivo. García Garrido ha explicado que la legislación española, a través de un Reglamento Técnico Sanitario, exige que las sales que se produzcan en España tengan un 97% de cloruro sódico en su composición, una cifra superior a la regulada en otros países de nuestro entorno.En este sentido, el parlamentario del PSOE ha subrayado la necesidad de rebajar este porcentaje ya que las salinas artesanales y sus productos derivados con menor cloruro sódico y mayor composición de oligoelementos son muy demandados en el contexto nacional e internacional, y la legislación española impide con la anterior normativa que el mercado nacional pueda ser competitivo.
Por ello, la propuesta que se ha aprobado en la Comisión establece, en primer lugar, modificar la actual normativa vigente para posibilitar la comercialización de sales con contenido inferior en cloruro sódico al establecido actualmente, en aquellos productos obtenidos por métodos no industriales, informando al consumidor de dichos contenidos. García Garrido ha recordado que en los últimos años se han perdido muchas salinas artesanales y que, con esta nueva medida y una buena gestión en la comercialización de estos productos, se podría empezar a tener rentabilidad económica en la explotación de las salinas artesanales fortaleciendo, de esta forma, el sector y haciéndolo más competitivo. No hay que olvidar, ha puntualizado, las ventajas medioambientales que supondría para una salina desde el punto de vista de la biodiversidad.
Imagen de las Salinas de Sanlúcar de Barrameda
El senador andaluz ha señalado que, además, la mejora de la competitividad de las salinas lleva aparejada la recuperación del cultivo tradicional de la sal y la recuperación medioambiental de todo el espacio de las salinas. Luis García Garrido también ha afirmado que se recuperaría una actividad con una gran tradición antropológica y cultural de suma importancia en algunos territorios. García Garrido ha señalado, por último, que el texto finalmente aprobado también propone incluir en dicha normativa las nuevas denominaciones comerciales de los diferentes productos derivados de la obtención no industrial de la sal.
Redacción "La Aventura Humana"
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